Un 23 de abril de 1935 se inauguró en Madrid el Mercado Central de Frutas y Verduras, un edificio único e innovador , obra de Francisco Javier Ferrero y Alfonso Peña Boeuf. Después de su progresivo abandono en la década de los ochenta, este espacio increíble ha sobrevivido milagrosamente décadas sin uso en una ciudad cada vez más especulativa que ha intentado convertirlo en intercambiador de transporte, centro comercial o «espacio gourmet y spa».

Finalmente el ayuntamiento actual ha retomado la idea del Área de Urbanismo de Gallardón de convertirlo en su gran «contenedor administrativo», una especie de «Nuevos Ministerios» municipales albergando a 2.000 puestos de oficina para empleados públicos de las áreas de urbanismo y hacienda. Para ello, el actual equipo municipal ha reconvertido el proyecto aprobado en la época de Gallardón, un proyecto que ha provocado la alarma entre los especialistas en patrimonio arquitectónico, como Docomomo Internacional y el Comité Internacional para la Conservación y Defensa del Patrimonio Industrial (TICCIH),  que no entienden cómo se destruyen algunos de los valores esenciales de esta obra fundamental de la arquitectura contemporánea para poder adaptar su uso como oficinas municipales.

Este 23 de octubre, la ciudadanía, la que ha defendido este espacio y su memoria de la voracidad urbanística, cuando a administración y partidos no les parecía interesar este espacio «vacío», convoca a una reflexión colectiva sobre este proyecto municipal escuchando la voz del ayuntamiento y la de los especialistas, pero sobre todo invitando a pensar entre tod@s qué queremos para este espacio único e irrepetible antes de que sea demasiado tarde.

 

Programa del debate: 23ABRILPROGRAM_def

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